"... Vivir a 700 metros bajo tierra sin conocer el sol durante 69 días que en realidad fueron noches, es una experiencia sobrecogedora que te lleva más allá de todo lo conocido.
Soy un feliz convencido de que el amor a la vida, una actitud alegre y siempre optimista, junto con el liderazgo, el trabajo en equipo, la pasión, la fe y la solidaridad, son lo que nos permite superar cualquier prueba en la vida.
Lo que viví fue un auténtico milagro, y quiero compartir lo que aprendí contigo".